Amazon es uno de los grandes gigantes del comercio electrónico a nivel global. Sin embargo, su éxito en algunos países no es tan notable. Un ejemplo es Francia, donde reciben una menor aceptación que en países vecinos como España o Alemania.
La compañía, inquietada por esta situación, ha decidido poner en marcha el Proyecto Ratatouille. Esta operación consiste en doce subproyectos más pequeños consistentes en anuncios de televisión local, promoción de productos franceses en Amazon y elaboración de estudios que muestren el impacto positivo de la presencia de almacenes de la compañía en el país.
Una iniciativa ya consolidada en el tiempo
El proyecto lleva en funcionamiento varios años. En concreto, ya en 2021 la empresa puso en marcha una tienda online que exhibe productos fabricados en el país. No obstante, hasta el momento ha generado pocas ventas.
Con el refuerzo en esta iniciativa, la compañía ha decidido mantenerla para seguir promocionando los productos galos. Más recientemente Amazon ha asistido a la popular feria agrícola de París. En el evento, celebrado el pasado mes de marzo, colocó un stand con productores locales de alimentos.
Otro orden de actuaciones es el que realiza para defender sus centros logísticos. Un estudio de Roland Berger pagado por la empresa tecnológica y también publicado en marzo sostiene que el 84% de los propietarios de tiendas locales en una región del noreste del país creían que un almacén cercano de Amazon tiene un impacto neutro en su negocio.
Y otra encuesta, esta encargada por Ifop, asegura que ocho de cada diez empleados de la compañía recomendarían trabajar en la empresa. Un portavoz de Amazon reconoce a Bloomberg que llevan más de dos décadas intentando ganarse la confianza de los clientes franceses a través de un buen servicio y precios bajos.
Una estrategia que imita un plan de McDonald’s
El Proyecto Ratatouille se denomina así por la película de Disney con ese nombre. En ella una simpática rata intenta triunfar en París con el ya tradicional plato de verduras que da título a la película animada.
Amazon pone en marcha esta iniciativa siguiendo las líneas de planes que ya ejecutó McDonald’s durante la década de los 90 del pasado siglo. En esa época, la empresa de comida rápida mejoró potentemente su imagen al asociarse con agricultores locales y adaptar sus menús a los gustos gastronómicos de los franceses, con más protagonismo para las ensaladas, los pasteles y hasta un McBaguette.
