Daniel Zhang, quien fuera CEO de Alibaba, ha renunciado a liderar la división de la nube de la compañía. La noticia de que el directivo iba a dejar su puesto de responsabilidad saltó hace meses, pero entonces se hablaba de que Zhang iba a adquirir un puesto de relevancia en la sección cloud. Ahora sabemos que tampoco ejercerá ese cargo.
El exjefe de Alibaba Group Holding Ltd. renuncia a esta posición y suma una capa de incertidumbre más a la empresa de comercio electrónico más grande de China. La compañía está atravesando una ruptura complicada y este paso es solo un agravante de la situación. Hay que recordar que durante el mandato de Zhang Alibaba consiguió resultados históricos.
El alto ejecutivo denunció renunciar a su nueva posición en la empresa, según afirma la propia Alibaba, que ha dado el visto bueno en un memorando interno. Zhang asumió el cargo de director de la división en la nube tras ceder sus funciones duales de director ejecutivo y presidente a Eddie y Joseph Tsai. Los nuevos director ejecutivo y presidente son confidentes cercanos del cofundador de Alibaba, Jack Ma. Ambos asumieron formalmente sus cargos a inicios de septiembre.
Nueva aventura empresarial para Zhang
La salida de Zhang pone fin a un periodo altamente exitoso para Alibaba. Su experiencia como CEO llevó a la empresa a ser una de las más relevantes en el mundo en el sector del comercio electrónico. En China se convirtió en la compañía más potente del país y exploró nuevos ámbitos como el comercio minorista físico.
Este ámbito pasó a ser uno de los negocios con mayor margen de crecimiento en el holding. La salida de Zhang de Alibaba fue anunciada por Bloomberg Línea y ha sido finalmente confirmada por un representante de Alibaba.
A partir de ahora Daniel Zhang dirigirá un fondo de inversión en tecnología de mil millones de dólares en nombre de Alibaba. Su renuncia a la división en la nube no es un abandono total de la empresa.
A partir de ahora, el trabajo que ejercía este ejecutivo lo realizarán Tsai y Wu. No es un buen momento para estos dos ejecutivos ya que la empresa atraviesa un cierto momento de caos. La división de Alibaba en seis empresas independientes dificulta todo este proceso. Los nuevos responsables asumen ahora la responsabilidad de transformar una compañía gigante valorada en 230.000 millones de euros y que lucha por superar los ataques regulatorios del gobierno chino.