La ola de robos en tiendas físicas que sufre Walmart en Estados Unidos puede concluir en una subida de precios de sus productos. Así lo ha afirmado Doug McMillon, director ejecutivo de la compañía, en unas declaraciones recientes.
Entre las medidas a adoptar también se estudia la posibilidad de cerrar establecimientos. La empresa no sabe cómo ponerle freno a este fenómeno, pues los robos incluso continúan a pesar de que muchas de las tiendas cuentan con apoyo de la policía.
McMillon ha explicado a la CNBC sus sistemas de seguridad, con medidas que aplican según la ubicación de la tienda y la labor auxiliar de la policía. En caso de que continúen los robos, los más afectados serán los clientes, que sumarán a la elevada inflación un aumento de precios. En términos inflacionarios, el dato actual es el más alto en los últimos 42 años.
Hasta el momento, los robos están afectando únicamente a las tiendas físicas, pero si Walmart se ve obligada a subir precios, esto acabará repercutiendo también al comercio online. En los establecimientos de esta cadena, muchos gerentes ya están optando por ofrecer numerosos productos a la venta bajo llave. Esto puede generar cierto rechazo en los consumidores, que no se sienten tan libres con el exceso de seguridad.
Los robos llegan también a otras tiendas… y a otros países
El fenómeno de los robos masivos no es algo exclusivo de Walmart. Michael Fiddelke, director financiero de Target, ha señalado que estas acciones en tiendas minoristas han generado pérdidas de 400 millones de dólares en el último año fiscal. Si hablamos de porcentajes, los hurtos han crecido un 50% en este tiempo.
El mayor problema es que los robos no son aislados, ni siquiera pequeñas acciones delictivas, sino que son actos organizados por delincuentes que planean hurtos mayores. McMillon aplaude el trabajo de la policía, pero sí demanda una respuesta más contundente por parte de los organismos de justicia.
En el caso de México, donde Walmart también tiene una amplia presencia, este fenómeno ya es muy conocido. En el país azteca se conoce como robo hormiga. Los hurtos afectan a todas las cadenas de supermercados. La Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) y la Asociación de Tiendas de Autoservicio y Departamentales (Antad) constatan que esta actividad provoca pérdidas de entre 10.000 y 14.000 millones de pesos al año, con unos 80 incidentes al día como promedio.