Amazon sugirió en su último balance trimestral una futura apuesta por el recorte en la plantilla logística, que está actualmente sobredimensionada debido a los años de pandemia. Según leemos en Xataka, el año 2020 supuso un pico de ingresos para la compañía, lo que obligó a esta a reforzar su área logística.
Ya en 2022, con la pandemia de Covid 19 más controlada, la situación es completamente diferente, lo que lleva a la empresa a querer deshacerse de parte de sus almacenes. Amazon estaría buscando dar salida a 3.000 kilómetros cuadrados de espacio de almacenamiento mediante el subarrendamiento.
Se trata de naves alquiladas en los dos últimos años y que hoy día apenas utiliza. También está intentando rescindir algunos de los contratos. Desde Bloomberg apuntan algunas fuentes que este subarrendamiento de espacios podía incluso ser mayor.
Estados Unidos, el laboratorio de pruebas
Las medidas a ejecutar por Amazon se llevarán a cabo exclusivamente en Estados Unidos. Esa es la idea de la compañía, que quiere dar salida a almacenes en Nueva York, Nueva Jersey, Atlanta y California.
Los 3.000 kilómetros cuadrados que quiere liberar Amazon suponen prácticamente un 5% del terreno agregado durante la pandemia. La idea inicial es subarrendar estas superficies de manera temporal, por uno o dos años, para dar respuesta a una situación coyuntural.
Amazon confía dar la vuelta a la situación en los próximos años, recuperando el nivel de las transacciones cuando mejoren las circunstancias del comercio internacional.
Reducir gastos adelgazando la plantilla
La segunda medida a ejecutar por la compañía es contener el gasto en logística mediante la reducción de personal. Brian Olsavsky, director financiero de Amazon, ha afirmado que durante la pandemia se contrató de manera muy rápida a mucho personal. Dos motivos obligaron a ello, hacer frente al aumento de demanda y cubrir las bajas causadas por el coronavirus.
En el momento actual, con Amazon disminuyendo sus ingresos y el peor balance trimestral en 20 años, la situación ha cambiado. Las declaraciones de Olsavsky hacen prever posibles despidos entre el personal de almacén.
Encarecimiento de precios y servicios
La tercera medida que ya está adoptando la compañía es un encarecimiento de algunos productos y servicios. Amazon intenta con esta política compensar sus malos resultados y tranquilizar a sus inversores.
El marketplace está cobrando un 5% más a los vendedores en la plataforma y la suscripción anual de Prime se ha elevado de 119 a 139 euros al año. Estas políticas solo se han llevado a cabo hasta el momento en Estados Unidos.