La primera pop up store de Shein en Madrid ha abierto causando una tremenda expectación. El pasado día 2 de junio miles de clientas se acercaron hasta la calle Sandoval de la capital para ser las primeras en adquirir sus compras en el establecimiento.
La tienda solo se mantuvo abierta hasta el domingo, en una estrategia con la que el gigante chino intenta seguir alimentando su negocio online. Se trata de la segunda iniciativa similar que lleva a cabo en España, tras la ejecutada en Barcelona en el año 2019.
Sin embargo, a pesar del éxito en marketing que ha registrado esta apertura, el resultado en cuanto a satisfacción por parte de las clientas no ha sido tan alto. Muchas compradoras pasaron rápidamente de la frustración a la decepción, pues después de estar en cola antes de las 9 de la mañana, al recibir un ticket con el número les comunicaban que solo podían entrar a la tienda entre las 9 y las 10 de la noche.
Una experiencia mucho más completa en la compra online
La sensación generalizada en muchas clientas es que la variedad de prendas y de talles era muy baja. No merece la pena venir, concluyen muchas compradoras. La decepción con la tienda física se contrarresta con el éxito que alcanza Shein en la compra online.
“El precio que pagas lo compensa todo”, señalan muchas chicas que hacen referencia a que en otras tiendas su desembolso por las mismas prendas es mucho mayor. La compañía china es experta en fast fashion a precios económicos. Su valor real es que ofrece todo tipo de prendas a precios muy accesibles, con presencia en más de 150 países. Además, un elemento diferencial frete a otras empresas es que ofrece tallas grandes.
Fortalecer los vínculos con los usuarios
La estrategia de las pop up store de Shein es algo que viene repitiendo desde hace años en grandes capitales a nivel mundial. Mingjie Zhao, director de marketing de la compañía, ha relatado qué persigue la empresa con estas aperturas.
La idea es reforzar los lazos con los clientes y darles la posibilidad de vivir una experiencia de compra física. La mayoría de productos expuestos, que incluye desde prendas a calzado pasando por accesorios, respetan las tendencias primavera – verano 2022.
El 5 de junio a las 20 de la noche cerró la pop store de Shein en Madrid. La conclusión final para la empresa es que ha conseguido sus objetivos. A pesar de que se produjo un cierto caos logístico y operativo durante algunas jornadas, la fidelidad de las clientas hacia la tienda sigue presente. Quizás no repitan comprando físicamente si vuelve otra pop store, pero sí lo harán a través de internet.