La multinacional de comercio electrónico Amazon cuenta con 29 supermercados sin cajeros en EEUU. Pero en las próximas semanas clausurará ocho de estos establecimientos. La empresa da marcha atrás con esta decisión a sus previsiones iniciales, que apuntaban al crecimiento en el comercio minorista automatizado.
Los cierres afectarán a dos tiendas en Seattle, dos en Nueva York y cuatro en San Francisco. La noticia la adelantó el medio especializado en tecnología GeekWire y posteriormente lo ha confirmado Amazon. La transición tendrá lugar en las próximas semanas y la clausura definitiva ocurrirá el 1 de abril.
No obstante, la compañía mantiene su compromiso con el formato Amazon Go. Además, asumen que en el comercio minorista es habitual de manera frecuente la estrategia de inversión. En estos momentos, ocho de sus 29 tiendas sin cajero, un 27,5% del total, no son rentables.
Un modelo de negocio exclusivo de EEUU
Este formato de negocio está presente solo en EEUU. Y aunque ha habido intentos para expandir el modelo a otros países, finalmente nunca han acabado materializándose. En 2021 la empresa planeó abrir su primer Amazon Go en Londres y posteriormente alcanzar las 30 tiendas en Reino Unido.
Igualmente, la tecnológica planteaba comenzar con el país británico para continuar más adelante con otros territorios en el Viejo Continente. Esta expansión iría ligada a los resultados en Reino Unido. Estos planes nunca llegaron a ejecutarse.
Un negocio en marcha desde 2016
El primer supermercado autónomo de Amazon se instaló en Seattle, en el año 2016, en un área cercana a las oficinas de la empresa. Casi siete años después la propuesta no ha cosechado el éxito deseado.
En los establecimientos los clientes cogen todos los productos de la tienda y salen sin pasar por caja. El sistema recibió el nombre de Just Walk Out (solo salga). Su funcionamiento se basa en la visión artificial mediante sensores de IA.
El fracaso, relativo, de Amazon Go, sienta sus bases en el teletrabajo. En EEUU mucha gente todavía no ha vuelto a las oficinas ni a la presencialidad, y buena parte de estas tiendas estaban enfocadas hacia ese target.
Una medida más de ahorro
El cierre de las ocho tiendas autónomas en distintas ciudades forma parte de un plan más ambicioso de Amazon para recortar costes. La empresa anunció en enero el despido de 18.000 empleados. Y la semana pasada detuvo el proyecto de construcción de su sede en Airlington, Virginia.
La compañía, a pesar de ser un gigante tecnológico que basa buena parte de sus ingresos en el comercio online, también tiene otras vías de negocio. El formato físico, sin embargo, no ha terminado de satisfacer todas las expectativas.