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    ¿Adivinas qué gigante textil puede estar detrás de la caída del gasto en moda?

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    Un informe de la Comisión Europea afirma que la moda es una industria que emplea a más de cinco millones de personas en el conjunto de la Unión. Esta importante contribución a la economía comunitaria se complementa con el impulso patrimonial a la cultura y experiencia europeas.

    Las afirmaciones de la Comisión contrastan con los datos que aporta Eurostat, que dejan entrever el debilitamiento de este sector económico en Europaa. En 2021, el gasto nominal en moda en la Unión Europea sobre el Producto Interior Bruto se situó en el 2%.

    Esto supone un recorte de cuatro décimas con respecto a 2019, antes de la pandemia. Y si se comparan con los datos de hace una década, la reducción es de seis décimas. Para entonces el gasto nominal era del 2,6%, según analiza el portal Modaes.

    La caída se produce en todos los países, pero en algunos es más acusada. Italia, un referente en la industria, la aportación cayó cinco décimas, hasta el 3,1%. En Francia este dato es del 1,6%, en un proceso que se retroalimenta año a año. España es otro de los grandes países que más ha reducido su aportación. En 2019 copó el 2,4% del total, mientras que en 2021 el valor se redujo al 1,8%.

    2022, un año de optimismo moderado

    Pau Almar, experto en moda y que ha trabajado en Mango y Zara, mantiene expectativas crecientes para 2022. Un informe de EAE Business School en febrero apuntaba a un crecimiento moderado pero constante en los próximos años: 3,5% en 2023, 3,1% en 2024 y 1,9% para 2025.

    Sin embargo, estos pronósticos ya no son certeros, pues se produjeron antes del conflicto bélico entre Rusia y Ucrania. La elevada inflación actual y un escenario geopolítico muy tensionado amenazan con una futura recesión económica.

    Vicente Narváez, profesor experto en moda en la Universidad Antonio de Nebrija, explica la situación. Muchas empresas han tenido que aumentar sus costes fijos y están trasladando estos al consumidor final.

    Inditex está iniciando esta política, al igual que la irlandesa Primark. En 2021, el gasto per cápita de los europeos en textil fue de 662 euros, mientras que en 2019 esta cifra se elevó a los 751 euros. En España, el gasto en moda en 2021 a nivel familiar fue de 1.156 euros anuales, frente a los 1.417 euros de 2019. Estos últimos datos son fruto de encuestas del Instituto Nacional de Estadística.

    ¿Es Shein el responsable de esta caída del gasto en moda?

    La pérdida de interés por la industria textil merece un análisis profundo. ¿Hay realmente desinterés o lo que sucede es que hay un cambio generacional que apuesta por comprar pero hacerlo de la forma más económica posible?

    La Generación Z no compra igual que los millennnials. Estos últimos tienden a consumir de manera más consciente y a huir la fast fashion, algo que no hacen los más jóvenes, que incluso han popularizado el fenómeno del haul.

    Pau Almar reconoce que Shein ha normalizado vender más barato y así ganar cuota de mercado. El precio ya fue en 2021 el principal factor para los españoles a la hora de elegir moda, según confirma un estudio de AIMC Marcas.

    Y a todo esto se suma el mercado de segunda mano. Otro estudio, en esta ocasión realizado por La Red del Cambio y llevado a cabo por Wallapop, señala que uno de cada tres españoles compra ya más productos de segunda mano que antes de la pandemia.

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