El estudio “La sostenibilidad en el e-commerce actual. El impacto de nuestra decisión de compra”, elaborado por EAE Business School, señala que el 88% de los consumidores desean que los ecommerce ofrezcan soluciones más sostenibles en cuanto a entrega y devolución de productos y servicios.
En el estudio, solo uno de cada cinco encuestados del público general considera que hoy por hoy se da un ecommerce sostenible. Esta percepción se suma a otro dato, y es que casi el 56% de los espaoles penaliza o está dispuesto a penalizar a los negocios online que resultan poco sostenibles.
Paula Rodríguez es Business Development Director de Webloyalty. Su empresa está especializada en Retail Media y trabaja habitualmente con ecommerce y plataformas marketplace. Rodríguez afirma que el consumidor actual es un agente de cambio. Ya no busca únicamente un producto o un servicio, sino que intenta lograr la coherencia en sus compras.
El cuidado del planeta es una preocupación cada vez mayor, lo que obliga a los partners del sector a incorporar criterios eco para satisfacer la demanda ciudadana y para contribuir positivamente con un problema real.
Criterios de sostenibilidad para el comercio online
Webloyalty estima que el comercio electrónico crecerá en 2023 en torno al 10% en el apartado de pedidos online, y entre un 5 y un 10% en el gasto online. La compañía, atendiendo a los resultados del estudio de EAE Business School, establece seis claves para que esta industria avance hacia la sostenibilidad.
Para ello ha implantado seis criterios ESG, término que deriva del inglés Environmental, Social and Governance. El primer aspecto a trabajar es incorporar un distintivo eco en la imagen corporativa. EAE Business School asegura que tres de cada cuatro usuarios valorarían poder detectar y ver este distintivo en tiendas sostenibles.
La segunda fórmula es apostar por la reintroducción de productos reciclados. Uno de cada tres consumidores ya consume artículos reacondicionados. Cubrir las 3R del ecologismo es otra apuesta esencial: reducir el volumen de material utilizado en los envíos, reutilizar los envases y hacer uso de materiales reciclables para frenar el impacto medioambiental.
La cuarta iniciativa es poner en marcha campañas que inviten a un consumo racional y consciente. Aquí habría que actuar frente a los gastos de envío y devoluciones gratuitas. En materia de entrega de última milla, los expertos recomiendan contactar con empresas de transporte que dispongan de vehículos eléctrico o híbridos. Finalmente, es fundamental reducir el consumo excesivo de papel y plástico en los envases.